A estas alturas, seguro que has visto en Netflix algunos documentales y programas que hablan muestran de primera mano hasta qué punto la tecnología domina nuestras vidas. Desde el momento en que nos levantamos hasta que nos dormimos, estamos llenos de información de todas las direcciones.
Necesitamos estas importantes herramientas para ser productivos y comunicarnos con personas de todo el mundo. El reto es la fina línea que separa el exceso de información de la falta de ella. ¿Cuándo hay que parar?
Aquí tienes algunos consejos valiosos para aumentar tu energía mental:
- Establece una hora específica del día en la que leerás tus correos electrónicos y respeta esas horas, no vayas más allá para tener algo de tranquilidad.
- No mires las notificaciones de las redes sociales ni leas los correos electrónicos nada más levantarte, en su lugar, prepara el desayuno o chatea con alguien con quien vivas; no mires el teléfono a primera hora de la mañana.
- Discute las preferencias de tu jefe y establece procesos. Además, discute el protocolo después de las horas de trabajo.
- Haz descansos durante el día y haz algo que estimule tu creatividad, como escuchar música o colorear.
- Cuando te vayas de vacaciones, ¡vete de vacaciones! Desconecta completamente del trabajo, no abras el correo electrónico ni te preocupes por la oficina, al menos durante un par de días.
- Descarta la culpa si no puedes responder a todos los correos electrónicos en un día.
- Recuerda… que no eres un robot.
- Cuando asistas a un taller o conferencia, céntrate en el ponente. Ignora los correos electrónicos, la mensajería o la escucha del buzón de voz.
- Limita el tiempo que pasas frente al ordenador por la noche después del trabajo.
Estos útiles consejos de cómo aumentar tu energía mental, te guiarán para superar o incluso prevenir el agotamiento.
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