Visitar Rio Secreto le ofrece a su equipo una muestra de este mundo mágico.
Rio Secreto se encuentra a pocos kilómetros al sur de Playa del Carmen, junto a la autopista 307 en la Riviera Maya. Está a una hora al sur de Cancún o 45 minutos al norte de Tulum.
En 2007, el propietario de Rio Secreto decidió permitir recorridos ecológicos a través del 10% de la reserva natural, con el fin de financiar la conservación del resto.
Visitar Río Secreto solo se puede hacer a través de los tours organizados que se ofrecen mediante reserva. Los recorridos lo llevarán a caminar y nadar a lo largo de aproximadamente un kilómetro de una de las cuevas (lo que significa que su visita representará solo una pequeña muestra de esta gran reserva).
Los mayas consideran que estas cuevas dan miedo, son un portal a Xibalba (también conocido como “el lugar del miedo”), el inframundo maya. Se han descubierto varios artefactos y esqueletos humanos en las cavernas, algunos de los cuales se remontan a casi 13,000 años.
Río Secreto es un laberinto de pasajes y formaciones minerales espectaculares. El agua gotea ligeramente desde los extremos de las estalactitas en el techo hasta las piscinas azules prístinas a nuestros pies. Esta agua se ha filtrado lentamente a través de la roca porosa, por lo que es tan limpia.
La magia del sistema de cuevas de Río Secreto es que hay 15 entradas diferentes. Las visitas solo se realizan en grupos pequeños, y nunca verás otros grupos durante tu visita, lo que significa que realmente te sentirás conectado a la cueva en tu propio VIP tour.
Asegúrate de llevar traje de baño y toalla. Rio Secreto ofrece un traje de neopreno, zapatos para el agua, chaleco salvavidas, casco y luz.
Las cámaras no están permitidas debido al entorno húmedo y peligroso de la cueva. Sin embargo, el personal capacitado puede tomar fotos con un equipo especial, que puedes comprar al final del recorrido.
